Esta es una receta muy sencilla y refrescante.
La verdad es que yo quería hacer un granizado de limón potente, de esos que saben a limón de verdad, a limón concentrado, pero al abrir el frigo vi que las limas me estaban mirando y me dio pena dejarlas ahí.
Si no tenéis limas que os miren, siempre podéis sustituir esas dos por un limón grande o dos pequeños.
3 limones grandes.
2 limas.
Una rama de canela.
250 azúcar.
1 litro agua fría.
ELABORACIÓN.
Comenzamos rallando la cáscara de dos de limones y de una de las limas.
Exprimimos todos los limones y las limas y ponemos el zumo en un cazo, junto al azúcar, la canela y la ralladura. Llevamos a ebullición durante siete minutos aproximadamente, para que reduzca un poco, se deshaga el azúcar y se concentren los sabores.
Dejamos enfríar.
Una vez frío, quitamos la rama de canela, lo mezclamos con el agua y metemos en el congelador. Si no quieres notar la ralladura de los cítricos pasa la mezcla por un colador (a mí personalmente me gusta sin filtrar).
Transcurridas dos horas, sacamos. Le damos una vuelta con una cuchara y volvemos a meter en el congelador. Repetimos la operación cuando pase una hora. Volvemos a congelar. A la hora removemos bien de nuevo. Ya estará nuestro granizado.